De los numerosos yacimientos de época romana que se contabilizan en la localidad de Montilla, se cuenta entre los fondos del Museo Histórico Local de Montilla con un amplio repertorio de piezas, ya sean fragmentos de cerámica, de lucernas, estucos, mosaicos...
Virginia Torres Ramírez, licenciada en Historia y
colaboradora honoraria del departamento de Geografía y ciencias del Territorio
de la facultad de Filosofía y Letras de Córdoba, está aprovechando la realización de prácticas de sus estudios de Máster, para llevar a cabo un proceso de limpieza de un buen número de estos materiales, así como su siglado, la realización de fichas y su introducción en el inventario general de este Museo.
Como ha puesto de manifiesto la misma Virginia Torres, el proceso que está desarrollando lo lleva a cabo a través de cinco acciones consecutivas:
1º Limpieza de
materiales: dichos materiales proceden de los fondos del museo de material de
época romana (sobre todo del siglo I-II d.C.) constituido por multitud de
fragmentos de cerámica de terra sigilata hispánica, africana y gálica, junto
con otras tipologías como cerámicas de
paredes finas, marmorata, a la barbotina etc. Y otros elementos fragmentados
como fragmentos de Lucernas, teselas, estucos, mármoles etc. Todo este material
pertenece a diversos yacimientos ubicados dentro del término municipal de
Montilla.
2º Siglado del
material: la finalidad de este proceso es la de darle a cada pieza un orden
numérico para tenerla encuadrada dentro del inventario con un número de
referencia y hacer más fácil su localización.
3º Fichas:
posteriormente cada pieza aparece reflejada en una ficha con unos campos
correspondientes donde se reseñan las características más importantes como son
el lugar, descripción técnica, procedencia, fotografía, medidas etc.
4º Inventario
de materiales: seguidamente toda esta información es recogida en una base de
datos creada y condicionada para registrar de manera informática todo lo que ya
hemos recogido en las fichas.
5º Recogida y
embalaje del material: una vez hecha la clasificación y un estudio aproximado
de los materiales, se procede a su embalaje, y recogida en cajas para su
deposición de nuevo en los fondos del museo.
Todo ello contribuye a conocer con más detalle los fondos de los que se disponen en este Museo, así como para sumar estas piezas al registro documental ordenado y clasificado.
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