Este sábado, día 5 de julio
a las 11:30 horas, podremos disfrutar de una visita guiada a la Parroquia de
San Francisco Solano, organizada por la Delegación de Patrimonio Histórico en
colaboración con la Parroquia del Santo.
San Francisco Solano (1549-1610),
evangelizador de Perú y otros territorios americanos y nuestro Patrón, decide
vestir el sayal franciscano con veinte años y acude al convento de San Lorenzo,
que se encuentra en las afueras de la ciudad.
Convento
de San Lorenzo
La fundación del convento
franciscano de San Lorenzo de Montilla se remonta a 1512 (por disposición
testamentaria del primer marqués de Priego, don Pedro Fernández de Córdoba) y
la comunidad franciscana lo ocupó hasta 1794, debiendo abandonarlo por
problemas de conservación.
El convento de San Lorenzo
se hallaba delimitado por una cerca de mampostería con partes recrecidas de
tapial y su acceso se efectuaba a través de una portada de arenisca.
Esta portada de acceso,
ejemplo del primer Renacimiento cordobés y atribuida a Hernán Ruíz I, estaba
conformada por un arco de medio punto abocinado y flanqueado por pilastras
cajeadas a las que se adosan columnas abalaustradas. Sobre este arco plateresco
se coloca un entablamento con un friso esculpido con bajorrelieves de roleos y
jarrones y, centrado, un escudo nobiliario de la familia fundadora. Las
enjutas decoradas con relieves de delfines y roleos y en el intradós del arco
los relieves presentan símbolos de la Pasión (lanza con flagelos o tenazas y
martillo).
El
escudo de los Marqueses de Priego
Presidiendo el arco de
acceso al convento se ubicaba el blasón nobiliario de los Marqueses de Priego, muy
valioso por su antigüedad y por el interés heráldico que representa. Un águila que
mira de frente y cuyas alas semiabiertas sirven de marco al escudo de armas de
la familia fundadora del convento. A su
vez, ésta se encuentra rodeada por una guirnalda y lambrequines ondeando al
viento.
El Escudo de los Marqueses
de Priego, que presidía el arco de acceso al antiguo Convento de San Lorenzo,
se puede contemplar en nuestro Museo Histórico de Montilla.